Veneno
Tú, qué
me reclamas, acaso no viste mi dolor, no escuchaste el grito ahogado en mi garganta, cuando se deshizo el alma y se
convirtió en silencio.
Tú,
reclamas, si todos estos años sólo esperé un mimo, una palabra, un gesto de
cariño.
Déjame
ir, es tarde ya tomé el veneno.
Alicia
M. Moreno
No hay comentarios:
Publicar un comentario